PI/03

Basada en la distrución de seis muros paralelos a lo largo de la diagonal. Cada muro se retuerce sobre sí mismo de tal forma que adquiere una doble función: permite caminar por su superficie e ir saltando de uno a otro y a su vez crea un espacio de aguardo en su interior. Está inspirado en la dehesa, pues en ella existen diversas encinas, todas en definitiva son árboles pero cada una es única e irrepetible, tiene un carácter propio. Esta idea es el motor del proyecto, pues, a priori todos los muros parecen iguales pero cada uno tiene su propia comprensión. La proporción bajo la que se rige es la serie de Fibonecci.